La respuesta a esta pregunta no es tan sencilla, dado que el término calibración, aplicado a un teodolito puede tener distintos significados para diferentes usuarios.
Para una utilización normal en ingeniería civil, donde suelen emplearse un par de teodolitos, y la técnica de voltear el ocular, los teodolitos son en esencia instrumentos auto-verificables, que no requieren calibración.
Pero si se utiliza un único teodolito para la medición de un ángulo, entonces hay varios parámetros que deben verificarse:
El descentrado de los círculos graduados -auto-corregible, si el teodolito se utiliza empleando el método de las dos lecturas (volteo del ocular).
La perpendicularidad entre los ceros de los círculos vertical y horizontal - el usuario puede verificarla y ajustarla fácilmente (muchos teodolitos tienen un control para su ajuste por parte del usuario).
La exactitud de las escalas angulares es sin embargo difícil de verificar - el circulo horizontal puede verificarse comparándolo con las indicaciones de una mesa angular y un colimador fijo, pero es extremadamente difícil establecer un sistema para verificar el circulo vertical.
La rectitud de la línea de visión; es decir, la capacidad de que el telescopio mantenga la dirección de puntería cuando se cambia el enfoque, es virtualmente imposible de verificar.
El Centro Español de Metrología sí realiza este tipo de calibraciones de dificultad elevada. Otras calibraciones más accesibles, en este mismo campo, son realizadas por algunos laboratorios acreditados por ENAC (www.enac.es).